Marc Levy vuelve cargado de magia y con mucho que decir

Un abuelo está sentado en un banco en un parque de París con su nieto. El parecido físico entre ambos es tal que a un observador imparcial le podría parecer que se trata de las dos mismas personas en dos momentos diferentes de su vida. Eso es precisamente lo que observó, pensó y asumió el escritor francés Marc Levy, uno de los más leídos de la nómina de artistas de las letras del país galo. Con esta escena, aparentemente habitual y cotidiana en su cabeza, Levy plantó el germen de su nueva novela, que acaba de aterrizar en las librerías españolas este mes de febrero. Su nombre: El pequeño ladrón de sombras; su misión: hacer revivir las palabras y vencer al silencio. 
"Si de pronto usted se encontrara por la calle al niño que fue, ¿qué le diría, con la experiencia de haber vivido?"; "¿es que el niño estaría orgulloso de lo que usted ha llegado a ser?". Son algunas de las reflexiones que el autor europea se ha hecho durante y después de la gestación de su novela. De hecho, la idea de la novela surgió tanto de conocer qué podría un niño decirse a sí mismo al verse como adulto sobre su propia vida como de la curiosidad de destapar ese pudor masculino cuando se trata de hablar del amor en su vida. Porque siguiendo la tónica general de Levy, este libro habla del amor, pero en términos generales y con mayúsculas: El amor incondicional de una madre por su hijo; el amor que sentimos la primera vez y que el tiempo no puede borrar; el amor que se acaba; el que nace de una amistad para toda la vida… Es más, esta es una historia con el sabor de los cuentos de siempre. 
A modo de sinopsis podemos decir que el protagonista de El pequeño ladrón de sombras (editorial Planeta; 18.90 euros) es un niño, sin nombre, que vive sólo con su madre en un pequeño pueblo de Francia hasta que un día descubre que tiene un don: puede hablar con las sombras y a través de ellas descubrir los miedos y sueños de la gente... un don que le puede servir para ayudar a los demás y también a sí mismo… 
Con estos argumentos y esta génesis, no es difícil deducir que con esta nueva novela, el autor de 'Cosas que no nos dijimos' o 'La química secreta de los encuentros' (su penúltimo libro) recupera esa magia de sus primeros escritos que le hizo tan popular y que convierte sus textos en una experiencia alegre y gratificante para los lectores. Y lo hace ahora con una novela original, divertida y sorprendente sobre la vida de un hombre que tiene ese don ya mencionado y que con él es capaz, a través de sus sueños de niño, sus heridas, sus encuentros y sus decisiones, ir descubriendo que lo que una vez soñamos no nos abandona jamás. En definitiva, se trata de una novela para volver a despertar a la imaginación, y que está precisamente muy indicada para los adultos que no han dejado nunca de ser niños.